La acupuntura nació en China hace más de 3000 años, en algunos documentos se la sitúa entre los años 2696 a 2598 A.C. Esta antigua ciencia que ha sido perfeccionada durante miles de años, forma parte de la medicina tradicional china y se basa en la inserción y la manipulación de finas agujas en puntos específicos (llamados en chino xue) del cuerpo, con el fin de mejorar el flujo y equilibrio de energía a lo largo de estos meridianos que atraviesan nuestro cuerpo. Mediante esta medicina curativa se pretende restaurar la salud y el bienestar del paciente.
La medicina china también contempla con este fin el uso de las moxas, un cono o puro hecho con la planta de Artemisa Vulgaris que se coloca sobre la aguja o cerca de la piel, en los puntos de acupuntura. Los acupuntores utilizan ampliamente esta técnica para tratar dolores.
En la medicina china se cree que las enfermedades se producen por un desequilibrio de las dos modalidades del ch'í: el yin, y el yang (yin-yang); por lo que la actuación sobre los puntos de acupuntura intenta reequilibrar la energía, estimulándolos o produciendo una depresión en ellos. Los puntos de acupuntura se distinguen por tener distintas aplicaciones basadas en tres principios: reequilibrar, estimular o sedar, ese flujo vital. Los puntos de acupuntura más importantes son los que regulan el fondo energético y se encuentran repartidos de codos a dedos, en los antebrazos; y de rodillas a pies en la pierna.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce a la acupuntura como complemento eficaz para un vario espectro de enfermedades, especialmente de carácter crónico. La terapia mediante acupuntura implica para el paciente una reducción en la ingesta de fármacos, así como una ayuda para la reducción del dolor en procedimientos quirúrgicos o procesos inflamatorios. La OMS ha publicado documentos y guías para animar los estudios clínicos de esta disciplina médica como un camino para validar la acupuntura y formalizar su uso terapéutico y de prevención de enfermedades.
Los partidarios de la acupuntura indican que es apropiada para el tratamiento de un gran abanico de patologías, haciendo especial mención al uso en casos de hernia discal, alergias, procesos inflamatorios o infecciones gripales. También destacan su uso como analgésico, e incluso para reducir el dolor en procedimientos quirúrgicos.
esta tarde, mirando unas cosas por internet, encontre este texto sobre la acupuntura. me ha llamado la atención porque no había oído hablar de ello. me parece que es un buen método de relajación, pero a la vez, un trabajo complicado a la hora de localizar los diferentes puntos para curar una enfermedad o dolor determinado. la verdad es que no encuentro la explicación por la cuál al poner una aguja en un determinado lugar de nuestro cuerpo, está actuando sobre otro punto, incluso curándolo. es algo fascinante.
ResponderEliminarAlberto estoy contigo. Yo tampoco me lo explico. Es una técnica bastante eficaz pero como tú has dicho díficil y por lo tanto cara. Pero me ha llamado bastante la atención. Es extraña esta técnica.
ResponderEliminarme ha parecido interesante la apucuntura, y como también me parecía imposible, he buscado información de porqué calma el dolor, espero que os sirva de ayuda para entenderlo, a mí me ha quedado más claro:
ResponderEliminarla Universidad de Rochester en Nueva York, dirigidos por Maiken Nedergaard, cree haber encontrado la explicación científica al alivio del dolor que produce la acupuntura.
Según ellos, esta técnica activa determinados mecanismos neurológicos que calman el dolor. Su experimento consistió en practicar la acupuntura en ratones de laboratorio, concretamente insertando agujas en sus rodillas. Al hacerlo, pudieron constatar que en esos tejidos se producía una concentración de adenosina, un neurotransmisor de efecto sedante que, de hecho, ya se encuentra presente en la composición de muchos medicamentos que alivian el dolor.
La adenosina reside en las fibras nerviosas de los transmisores del dolor y su presencia consigue ralentizar la actividad de éstas, de tal manera que el dolor se suaviza en el paciente.
No obstante, también pudieron comprobar que lo que realmente produce el citado efecto sedante no es la inserción de las agujas, sino su rotación una vez introducidas. Al girarlas de forma intermitente, tal como hacen los profesionales de esta disciplina, el dolor se alivia.
En cualquier caso, antes de visitar a un acupuntor, debemos cerciorarnos de su profesionalidad porque, como en toda disciplina novedosa –y ésta lo es en occidente-, hay mucho pillo que lo único que nos provocará será dolor en nuestra cuenta bancaria.